Por fin les puedo compartir mi viaje a Chile de este año, después de mucho tiempo pude visitar mi tierra natal, abrazar a la familia y amigos de la vida. Fue reencuentro muy bonito, sobre todo para mis hijos poder conocer un poco más de su origen, de la tierra donde crecieron sus padres y lo mejor de todo comer tan rico como fue posible. Yo soy oriunda de Valparaíso y mi esposo de Puerto Montt, así que es paso obligado visitar estas regiones, por supuesto también aprovechamos de estar en Santiago y bueno la historia fue así…
No entraré en detalles de nuestras familias, pero si estamos super agradecidos por todas las atenciones y tiempo que nos dedicaron. A nuestra llegada partimos a Valparaíso, ese día mi compadre nos preparó un rico pisco sour, reineta a la parrilla que estaba increíble. Al otro día fuimos a la feria, un lugar tan popular y que siempre íbamos los sábados con mi padre cuando era pequeña , me trajo muchos bonitos recuerdos y la verdad se extraña este tipo sitios donde uno puede comprar las verduras y frutas así.
La reineta no es un tipo de pez que pueda encontrar en Atlanta, y cuando me preguntaron que extrañaba más en cuanto a comida sin duda son los pescados y mariscos frescos y sin duda Valparaíso es un sitio ideal para degustar.
Anduvimos paseando por mi Cerro Alegre, tan querido y recordado, encontré muchos más locales y bueno pasamos a la tienda La Dulcería un lugar donde venden caramelos artesanales muy ricos, ideales para ir probando mientras vas caminando por el cerro.
Ahora les quiero hacer una super recomendamición en el Cerro alegre también y es la Rojo Galería, encontrarán una gran colección de artistas emergentes y establecidos, yo quedé impresionada y enamorada de muchas obras, por esta vez solo me traje cuatro pequeños afiches los cuales ya enmarqué y lucen increíbles en mi casa. No duden en visitar este lugar y apoyar a su vez el arte chileno.
Podría estar toda una tarde entretenida caminando por estas calles del Cerro Alegre y Cerro Concepción, se encuentran muchas paisajes bellos para fotografíar.
Una alegría que me da es saber que aún estén vigentes algunos ascensores como este El Peral que dentro del mismo podrán encontrar una tienda muy bonita con muchos productos y artesanías. El valor por subir en este ascensor es solo de $350 pesos chilenos, pueden acceder por el ascensor el Peral o por la escala ubicada al costado de éste. También otra vía de acceso es por la calle Urriola, subiendo por el pasaje Apolo. Luego vas a dar al Cerro Alegre, precisamente al mirador Paseo Yugoslavo, allí encontrarás el Palacio Baburriza, me fijé esta vez que abren de martes a domingos y siempre hay una serie de exposiciones y actividades para visitar.
Hay lugar que les voy a recomendar 100% si quieren almorzar, comer rico y ser bien atentidos y es el restaurante Poesía de Sabor, allí disfrutamos las mejores machas a la parmesana, también comidos caldillo, calugas de pescado, todo sabroso, rico y lo mejor la atención, sin duda volveramos.
Otro día en Valparaíso fue andar en trole, aprovechamos de recorrer la ciudad desde la Av.Argentina hasta el puerto, fue increíble ver lo dañado que esta mi Valparaíso querido, lo peor de todo que son los jóvenes que a falta de educación y no me refiero a la que te enseñan en el colegio, sino en la casa, dónde aprendieron que rallando, enfeando el lugar donde viven lograrán encontrar respuestas a sus demandas, es una falta de respeto tan grande sobretodo para las personas mayores que han vivido toda su vida allí. Ojalá que en el transcurso del tiempo las cosas puedan mejorar y Valparaíso revivir, porque es una ciudad que tiene muchísimo potencial para el turismo y eso se traduce a dar mucho trabajo para las personas en variadas áreas que viven allí.
Ahora volviendo a lo que comida se trata, tuve tan gratos recuerdos de volver al puerto y visitar el Emporio Echaurren, cuando pequeña iba con mi padre a comprar allí algunas veces, en ese mismo mesón de mármol que aún conservan. En el primer piso ofrecen cafés, pasteles y helados, mis hijos quedaron fascinados con el helado de Hojarasca manjar. Luego si suben al segundo piso podrán encontrar la zona del restaurante como tal, bastante amplio y han sido por lejos las pizzas más ricas que hemos probado en mucho tiempo, realmente 100% recomendado este lugar.
En otro día maravilloso en Valparaíso con un día soleado y realmente agradable, fuimos a un increíble restaurante en Cerro Alegre, Circular en donde podrán disfrutar de una exquisita carta de pescados y mariscos frescos de la zona. Mi hija disfrutó de un jugo de naranja natural delicioso, como pocas veces ha probado en un restaurante, detalles que hacen la diferencia, el servicio fue buenísimo y el ambiente también, realmente pasamos un memorable momento y sin duda volveremos.
Otro sitio increíble, agradable y de una calidad excepcional es el María María, una cafetería en donde todo lo preparan allí, nosotros llegamos un poco antes de la hora del cierre y nunca nos presionaron y nos atendieron increíble, probamos variadas masas dulces, y un croissant de ensueño, delicioso todo lo que pudimos degustar y el café de muy buena calidad.
Otro lugar que quise que mis hijos conocieran fue las Cecinas Sethmacher, un lugar emblemático del puerto, que también iba cada sábado con mi papá cuando pequeña, la calidad de sus productos es insuperable, han pasado los años y su sabor siguen exactamente igual, fue volver a mi infancia de una manera tan agradable y mis hijos quedaron fascinados, les encantó y bueno a mi esposo también. Aprovechamos de comprar jamón, paté de ternera y salame.
La foto de abajo, la llamo opuestos, un día por la ruta 68 en Valparaíso, con una neblina muy densa, colores típicos del invierno y al otro una foto que tomé el día antes en Viña del Mar, en donde pudimos ver un atardecer lleno de colores preciosos, estaba fresca esa tarde, pero super agradable para caminar por la Avenina Perú.
Luego de unos días en Valparaíso en donde el clima nos acompañó de manera espectacular, fuimos ahora a visitar a la familia y amigos en Santiago, tuvimos la suerte de alojarnos en un lugar donde estuvimos muy central de variados puntos prácticos, también teníamos movilización muy cerca como el metro, Uber, micros, etc. Acá el clima estuvo más frío, pero no nos podemos quejar, porque justo llovió una tarde/noche y al otro día estaba todo tan despejado y hermoso, que disfrutar de una paisaje así con un rico café es insuperable.
Nunca habíamos ido al Sky Costanera y estábamos curiosos de conocerlo, ya que es el mirador más alto de Latinoamérica, nosotros justo fuimos como las 5 de la tarde, y fue fabuloso porque pudimos ver el atardecer con una vista impactante hacia la cordillera y luego el anochecer donde se pudo apreciar el movimiento a esa parte de la ciudad, fue super agradable. Andaba bastante gente, pero todo fluyó muy bien e incluso había una banda en vivo que hizo todo el ambiente mucho más ameno de lo que ya era. Luego bajamos y en el mall en sí fuimos a tomar once, no recuerdo el nombre del sitio, pero eran un crepes muy ricos.
Otro día en Santiago fuimos en metro hasta el palacio La Moneda, caminamos por el entorno y todo muy bien, aprovechamos de visitar el Centro cultural La Moneda, en donde podrán encontrar diferentes expositores, artesanías, tiendas y restaurantes. Muy agradable y me encanta que existan estos espacio a veces tan poco conocidos.
La calidad del metro de Santiago es buenísima, he conocido muchos metros de otros países y no hay nada que enviarle a ninguno. Anduvimos también a la hora en donde se llenó por completo y al final es la misma gente con su educación o falta de esta misma que puede hacer que el viaje sea agradable para ellos o el entorno. Es un poco complicado, pero en cuanto a la infraestructura todo muy eficiente.
Luego fue el turno de nuestro querido Sur de Chile, qué suerte poder volver a esta tierra que tanto nos gusta y en donde pudimos también compartir con la otra parte de la familia y amigos. Esta vez nos quedamos en Puerto Varas, desde allí nos movilizamos para visitar Puerto Montt, conocer el mall que estaba muy moderno, acá encontramos la Feria chilena del libro con mucha más variedad de libros que otros lugares que habíamos ido. También fuimos por supuesto a visitar Angelmó, y comprar variadas artesanías, yo me traje una caja para el té preciosa.
A pesar de las advertencias igual quisimos un día almorzar por la zona de Angelmó, si bien estaba rico, pudimos ver la carta y los precios de los platos para así no llevarnos sorpresas, debo decir que nos atendieron super bien, pero por lejos nos gustó más lo que probamos en Valparaíso en cuanto a mariscos.
Como nos quedamos en la casa de mi cuñada, pudimos comprar erizos que tanto ama mi esposo, también disfrutamos de los locos entre otros mariscos. La verdad que no nos podemos quejar, comimos increíble!
Sin duda se extraña muho tener la opción de comprar pescados y mariscos frescos, esta variedad tan rica en Chile.
La foto de los piñones, la saqué en un supermercado en Santiago, me sorprendió y me dio gusto a la vez que vendan este ingrediente tan milenario y típico de la zona centro y Sur de Chile. Es un fruto seco que se puede consumir crudo y sirve para variadas preparaciones saladas o dulces. Es un ingrediente lleno de nutrientes que se recolecta de los bosques en donde gracias a la Araucaria nos brinda este magnífico fruto.
Recorrimos variados lugares en el zona Sur, como Frutillar, Puerto Varas, Puerto Octay, los alrededores del lago Llanquihue y nuevamente visitamos un imperdible en Ensenada en las Onces Bellavista con una vista increíble al volcán Osorno, con una comida deliciosa de principio a fin, 100% recomendable.
Siempre falta tiempo para visitar más lugares, tengo cientos de fotos, pero este post se estaba haciendo muy largo y creo que estoy compartiendo una parte práctica de este viaje, les recomiendo si vas con familia, con niños, o solo adultos, las alternativas son distintas, hay mucha oferta para los diferentes bolsillos para disfrutar mi Chile querido. Lo más increíble es que hay muchos emprendedores, muchos lugares donde disfrutar de la buena mesa, también para comprar maravillosas artesanías y productos locales, para quienes vivimos lejos de nuestro Chile, esto toma un valor diferente.
Siempre es importante investigar, ir por datos, y gracias a las redes sociales es que uno puede conocer mucho de estos sitios para armar un buen y adecuado itinerario.
Fue un hermoso reencuentro con mi tierra natal, con mis hijos y mi esposo quedamos agradecidos y felices de este viaje.
No duden en escribirme por datos o si tienen alguna duda, en cada para palabra que está de color azúl o marcada en forma especial en el texto arriba, lo llevará a la página o Instagram para que puedan tener más información.
